Internet aceleró el avance del conocimiento en distintas
áreas, pero todavía hay quienes sostienen que eso ha disminuido el número de lectores
de libros y multiplicado los perezosos, porque ahora se profundiza menos en los
temas.
Es enorme la lista de periódicos y revistas que han
desaparecido en los países desarrollados. Los periodistas desempleados se
cuentan por miles, mientras el acceso a la información es fácil y rápido,
aunque, por eso moleste a quienes temen al debate de las ideas. Por eso algunos
gobiernos hipócritas hablan de democracia pero se oponen al libre uso de la
red.
Y aunque algunos piensan que eso ocurre solo en China, se
equivocan. La censura es descarada en
Cuba, mientras en Venezuela se interfieren correos electrónicos y se formulan
acusaciones a supuestos conspiradores contra el régimen de Nicolás Maduro. Desde
la presidencia de Hugo Chávez, Venezuela comenzó a avanzar en ese sentido, al
establecer el punto único de entrada y salida a internet.
Nicolás Maduro y sus acompañantes restringen cada día más
cualquier manifestación de discrepancia. Agreden físicamente a los
parlamentarios de oposición y les impiden el derecho de palabra, con lo cual se
manifiesta la intolerancia y el abuso.
Ahora encaminan a restringir el uso de las redes sociales. La manipulación de los medios radioeléctricos
ha llegado a tales niveles, que los venezolanos encuentran en internet una vía
para revelar la dramática situación, el acoso. Y aunque el uso de la red con fines pornográficos o terroristas es condenable, también debe serlo cuando atenta contra el libre juego de las ideas.
Pero en el ambiente de represión que se vive en Venezuela, cabe preguntarse: ¿Será infinita la
capacidad de tolerancia de los ciudadanos? ¿No se estará preparando el camino para un estallido social
sin precedentes?
Ricardo - Gracias por agregarme a tus círculos.
ResponderEliminarEs impresionante la situación de Venezuela... y se nota "de lejos" hacia donde se mueve este gobierno y conduce a los ciudadanos que lo han elegido y a los que no también. Recuerdo cuando llegaban mis compañeros de la Shell de Venezuela a Cali, por allá por 1994-95... hermosos caballeros, joviales, orgullosos, llenos de frescura y ganas de vivir!. Hoy Venezuela no me permite ver eso en sus gentes... como ha cambiado todo... no? Recibe un gran abrazo,