Jaime Lusinchi fue dirigente político desde muy temprana edad y un luchador insigne contra la dictadura del brutal Marcos Pérez Jiménez. Saboreó las alturas del poder, al ejercer la Presidencia de Venezuela entre 1984 y 1989, pero también vivió en pellejo propio las dificultades de la clandestinidad y del exilio.
Entre sus rasgos principales como dirigente político fue
el estímulo a la formación de nuevas generaciones políticas. Era un demócrata convencido y practicante del
debate amplio y respetuoso. Durante su
gobierno el país vivió en paz, pero también tuvo desgastadoras confrontaciones
con su compañero de partido Carlos Andrés Pérez y con otros sectores de la vida
nacional. En la foto que acompaña esta
nota aparezco conversando con él en Miraflores, durante la entrega del Premio
Nacional de Periodismo en 1985. A su
lado se observan Octavio Lepage, Simón Antoni Paván y Armando Durán. Paz a sus restos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario